YAMATO, el mayor buque de guerra de la Armada Imperial Japonesa durante la Segunda Guerra Mundial, junto a sus gemelos Musashi y Shinano Desplazaba 65.027 toneladas en vacío, de las cuales 21.266 eran de blindaje, . Su longitud era de
256 metros en la línea de flotación y 263 en total. Portaba las mayores piezas de artillería embarcada jamás construidas, con un calibre de 46 centímetros, capaces de alcanzar blancos a más de
40 kilómetros de distancia.
El Yamato no podía terminar la guerra incólume, por lo que los altos mandos japoneses decidieron darle un fin noble al orgullo de la Flota Combinada Japonesa, decidiendo hacerlo salir hacia
Okinawa para atacar directamente a la flota de desembarco estadounidense,. La idea básica era atacar a esa flota, y en caso de daños o de sobrevivir a un primer encuentro, embarrancar cerca de la costa y
convertirse en una batería costera.
Su salida fue inmediatamente percibida por los submarinos estadounidenses USS Threadfin y USS Hackleback.
Hacia el mediodía, 386 aviones (180 cazas, 75 bombarderos en picado y 131 torpederos) fueron enviados a interceptarlo cuando aún faltaban 200 kilómetros para alcanzar Okinawa.
El acorazado fue atacado en tres oleadas sucesivas, recibiendo 8 impactos de bomba y 10 torpedos en un combate de casi dos horas. En su cubierta, la carnicería realizada entre los servidores de las piezas antiaéreas fue terrorífica