La herencia cultural de Graus sobrevive en su arquitectura, sus tradiciones y sus muestras de arte. La ciudad medieval sigue viva en sus calles y en su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico y en el que todavía se conservan partes de la muralla y tres de sus puertas. La Plaza Mayor constituye un lugar único en el que conviven diferentes estilos arquitectónicos y destacan también en la ciudad la Basílica de la Virgen de la Peña, la iglesia parroquial de San Miguel (ambas de origen románico), el medieval Puente de Abajo y las tres casas-palacio (Barón, Heredia y Bardaxí). Son solo algunas de las muestras de una localidad que ofrece historia, monumentos, arte (con su singular románico) y al mismo tiempo naturaleza, rutas de senderismo y bellos enclaves naturales.