Formado por varios enclaves, entre los que destacan su casco histórico o el pintoresco barrio de Lepe, en la zona de la montaña destacan los caseríos de La Palmita o Las Rosas, lugares con encanto rodeados de la vegetación colindante del Parque Nacional del Garajonay, destacando asimismo la presa de Las Rosas, un gran embalse rodeado de verdor donde el tiempo parece que se ha detenido y donde solo enturbia el silencio el canto de los pájaros.