El origen de esta localidad extremeña es aún desconocido. Si bien, es evidente que no pudo ser antes del siglo IV, ya que es en ese siglo cuando vivió San Martín, santo al cual está dedicada esta hermosa localidad. Fue sede de la Orden de San Juan de Jerusalén y capital del Corregimiento de Jálama. En su territorio tuvieron lugar algunos de los acontecimientos que marcaron la historia de este país. El rey Fernando II repobló la comarca con pobladores del reino de León y de Galicia. De ahí la característica forma de hablar de los habitantes de la zona: el mañego.