De entre los procedimientos de pesca más notables que se remontan a la época romana y de los que han quedado algunos vestigios en nuestra costa hay que destacar los corrales. Son interesantes por su originalidad y por haber pervivido durante muchos siglos.
Los corrales se establecieron en costas atlánticas en las que las mareas son apreciables. El nombre castellano proviene de su estructura, que recuerda los recintos formados con tapias de piedra para guardar el ganado. En el caso de los corrales marinos su función no ha sido guardar peces sino capturarlos en su interior cuando se retiraban las aguas con las mareas.
Su entigüedad queda reflejada en la siguiente "VISTA DE LA CIUDAD DE CÁDIZ EN 1564" (de jarife.org)