Puente de Triana, Sevilla
El puente de Triana de Sevilla, nombre con el que popularmente se conoce al puente de Isabel II, une los dos frentes urbanos que mantienen el Arenal y Triana sobre el río Guadalquivir.
Construido entre 1845 y 1852 por los ingenieros franceses Gustavo Steinacher y Ferdinand Bennetot, se trata de una moderna construcción de hierro que sustituyó al primitivo Puente de Barcas que históricamente había existido en aquél lugar durante siglos conectando la zona del Arenal con las inmediaciones del antiguo castillo de San Jorge de Triana.