En el pueblo de Baler, provincia de Aurora, Luzón, Filipinas, se produjo entre 1898 y 1899 una historia que conmocionaría a la opinión pública española. Una historia con una parte heroica y otra cómica.
Un destacamento español, con 50 soldados y 4 oficiales, quedó aislado en el entonces pueblo de Baler y durante 337 días resistieron el sitio de los rebeldes filipinos, si arriar la bandera... Lo mas curioso es que en medio, España habia perdido Filipinas (le había traspasado la soberanía a Estados Unidos) y por otro lado Filipinas había declarado la independencia.
Los españoles, no solo resistieron los asaltos de los filipinos, sino que tampoco se dejaron convencer para deponer las armas, ni por los norteamericanos, ni por varios emisarios del ejército español a los que consideraron, posibles traidores.
En un ultimo intento del mando español (que entonces estaba retirando sus tropas de Filipinas) se envió al teniente coronel de Estado Mayor Aguilar. Aguilar tampoco fue creído por los sitiados, pero le dejó a los sitiados algunos periódicos.
En aquel momento, el enfrentamiento ya no era entre españoles y filipinos, sino entre filipinos, que sentían que se les usurpaba su independencia, y norteamericanos.
Solo algunos días después y tras ojear los periódicos españoles, que en principio se pensaba que eran falsos, encontraron una noticia que hizo que los sitiados tuviesen que dar crédito a los documentos y fueron conscientes de lo absurdo de mantener la resistencia.
La noticia era un conjunto de traslados de oficiales españoles, entre los que encontraron, el traslado a Málaga de un oficial amigo del entonces jefe de la guarnición sitiada, el teniente Martín Cerezo. Martín Cerezo se dio cuenta de que aquella noticia no podía ser falsa, pues los insurgentes no la podían haber inventado.
Como curiosidad, los soldados españoles no salieron de Baler como prisioneros de guerra, sino con el reconocimiento de su valor por los sitiadores y fueron recibidos como héroes, tanto en Manila como a su vuelta a España.
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El Día de la Amistad Hispano-Filipina
El 5 de febrero de 2003 el Congreso de Filipinas acordó, a propuesta del senador y balerense Edgardo Angara (incansable promotor de la lengua y la cultura españolas en Filipinas),234 el establecimiento de un Día de la Amistad Hispano-Filipina para conmemorar los vínculos históricos y culturales entre Filipinas y España. También acordaron elegir el 30 de junio como fecha de esta conmemoración, en memoria del sitio de Baler, puesto que este fue el día del decreto del presidente Aguinaldo por el que se consideraba a los «héroes de Baler» amigos de Filipinas y no prisioneros de guerra).
Quedó establecido en virtud de la Ley de la República Nº 9187 de 22 de julio de 2002,235 cuya introducción establece lo siguiente:
Un 30 de junio, el presidente Emilio Aguinaldo ensalzó a los soldados españoles sitiados en la iglesia de Baler por su lealtad y su caballerosa valentía. Para honrar este memorable episodio, es de justicia que se declare dicho día como fiesta nacional, de manera que se recuerde el acto de benevolencia que ha asentado los cimientos de unas mejores relaciones entre Filipinas y España.
[..] El treinta de junio de cada año queda pues declarado como el Día de la Amistad Hispano-Filipina, para conmemorar los vínculos culturales e históricos, la amistad y la cooperación entre Filipinas y España. Se declara por tanto fiesta especial de carácter laborable en todo el país, y fiesta especial no laborable en la provincia de Aurora.
es.wikipedia.org/ ...o_de_Baler
Por cierto,
Baler vuelve décadas después a los libros de historia por otro acontecimiento bélico, aunque esta vez de mentira... Es un lugar del rodaje de la película Apocalypse Now.