Atenas, por su parte, había suspendido las vacaciones de sus militares, declarado el estado de alarma y mandado fragatas a la zona. Pero la canciller alemana Angela Merkel intervino, llamó a Erdogan y consiguió que los turcos volvieran a casa. “Nos recordó a la crisis de los misiles de Cuba en 1962”, le dijo una fuente del Gobierno alemán al diario sensacionalista 'Bild'.
¿Guerra? ¿En el Mediterráneo? En los últimos meses, la búsqueda de gas, los polemicos límites marítimos y una Turquía más activa que nunca fuera de sus fronteras han convertido al Mediterráneo Oriental en un polvorín, avivando un conflicto con 200 años de historia entre Atenas y Ankara.