Los Jardines de Versalles son el ejemplo máximo de lo que se considera en el mundo un jardín francés, caracterizado por ser un espacio geométrico y acotado, con un orden decorativo muy marcado en el que las flores y los setos toman un gran protagonismo. Además los parterres son muy recargados y en ocasiones parecen auténticos tapizados y al conjunto se le añaden elementos como fuentes y esculturas entre otros.
Sus calles empedradas están rodeadas de una muralla medieval y son perfectas para disfrutar de la magia de este lugar, en ellas encontrarás iglesias, casas de un blanco inmaculado adornadas con flores, antiguos palacetes, tiendas de artesanía, numerosos miradores desde donde disfrutar del atardecer o ver las increíbles vistas al Valle del Río Guadiana y los campos cercanos y hasta un imponente castillo del siglo XIII.
Este podría ser el lema de los hospitalarios residentes de Crupet. Caminando por el pueblo, se encontrarán con decenas de signos que derriten el corazón, como una caja de hierbas o una maceta de flores, invitando a los transeúntes a coger un tallo de albahaca o un ramo de flores. O, puede que vea una pequeña biblioteca en la calle, donde los ratones de biblioteca pueden pedir prestado un libro. La posibilidad de un encuentro aleatorio con un local es alta, y podría convertirse en un conocido y una agradable conversación en el pub local. Todo esto es sólo una pequeña parte del encanto de Crupet.
La visita al castillo es corta pero muy enriquecedora. Por ejemplo, aprenderás que el castillo tenía todas las comodidades modernas desde el momento en que se construyó, como agua corriente o iluminación con gas. Sin embargo, lo que más me gustó fue visitar los jardines llenos de flores y los huertos e invernaderos.
El archipiélago de las Azores está compuesto por nueve islas volcánicas llamadas Santa Maria, São Miguel, Terceira, Graciosa, São Jorge, Pico, Faial, Flores y Corvo, que se diseminan en medio del océano Atlántico Norte.
Tal vez la mejor época para visitar el Valle de Vipava sea la primavera, cuando las flores y los árboles comienzan a dar sus primeros frutos. Los huertos comienzan a llenarse de todo tipo de hortalizas, frutas y flores que decoran huertos y jardines. En ésta tierra tan rica podemos encontrar una gran variedad de frutas, cómo cerezas, albaricoques, higos… frutos que podremos probar en algunos de los alojamientos con encanto que ofrecen al viajero algunas experiencias únicas en su entorno.
Chisináu es la capital de Moldavia. Exhibe avenidas y edificios de proporciones comunistas, pero también tiene calles y bulevares agradables, con terrazas en verano, tiendecitas tradicionales y puestos de flores. Las visitas culturales estrictamente obligadas son al Museo Nacional de Historia y a la casa de Pushkin. Hay otros museos que están bien, como el de arte o el de etnografía, para quien tenga tiempo, y el militar, para quien le guste.
Considerada la población más antigua de la bahía de Boka el principal atractivo de Risan es la villa romana y los mosaicos que aún se conservan del pavimento. Uno de los motivos de los mosaicos es el de Hipnos, reclinado en una almohada, el dios del sueño, único testimonio en todo el mundo romano. Además podemos distinguir motivos geométricos, flores, plantas y viñedos.
La Isla de Mainau en el Lago Constanza, al sur de Alemania es también conocida como la isla de las flores. Es uno de los grandes atractivos turísticos del bello lago fronterizo con Suiza.
La entrada a la isla se hace previo pago pues es privada. El edificio más importante de la isla es su palacio barroco. De clima suave millones de flores la decoran, muchas de ellas formando figuras, posee un mariposario, pero miles de ellas sobrevuelan libremente a los visitantes y son de gran variedad y colores. El espacio cuenta con variados tipos de columpios.
El Arboretum, creado en 1856 por el Gran duque Federico I de Baden, alberga 500 especies de árboles, algunas de ellas muy raras en Alemania.
A la entrada de la isla, pero fuera del recinto de la misma, se halla la Cruz de los suecos, una voluminosa escultura de metal arrojada al lago después de haber sido robada durante la Guerra de los Treinta Años
En el palacio barroco se reúnen todos los años algunos premios Nobel durante una fiesta.
Vevey vivió su primer auge en la Belle Epoque a finales del siglo XIX. Aún hoy en día, los suntuosos hoteles y el paso ribereño con sus palmeras y flores recuerdan esta época. Vevey es a la vez un moderno centro regional, sede principal del consorcio mundial de alimentos Nestlé.
...viento del otoño que trae el trigo y los frutos: Joven acarreando frutos y trigo en su manto.
SE - Evros. Viento funesto del este que traía calor y lluvia: Un hombre maduro cubriéndose con una capa que soporta una vasija invertida derramando agua.
S - Notos. Viento caliente que traía tormentas al final del verano, que podía conllevar la pérdida de las cosechas: Joven vaciando una vasija para producir la lluvia.
SW - Lips. Muchacho alado empujando la proa de un barco dirigiéndola hacia el chorro de aire.
W - Zephiros. Joven con poca ropa repartiendo flores. Suave brisa fructificadora que anuncia la primavera.
NW - Skirion. Hombre barbudo con una vasija de bronce repartiendo brasas de carbón. Anuncia la llegada del invierno.
He realizado un montaje para ver cada uno de los bajo relieves representando a los vientos, indicados sobre el lado correspondiente de la torre en GE:
Vale la pena recordar es la Capilla Baglioni pintado por Pinturicchio y que contiene algunos frescos de Perugino.
Por último, es importante mencionar productos gastronómicos de Spello, entre ellos, el aceite de oliva es el más importante.
En cuanto a los eventos organizados en la ciudad no se puede seguir sin mencionar la "Infiorata", un festival de flores que se celebra cada año con motivo del Corpus.
Ella tiene un clima excepcional, con un promedio anual de 300 días de sol y cielo azul de pureza incomparable.
Ciudad de flores de unos 8.000 habitantes, 485 metros, 130 km de Marsella y Grenoble, 180 km de Niza, el lugar de nacimiento del poeta Pablo Arena (1843-1896), junto con Herbolzheim (Alemania), Oliva (España), Fidenza (Italia). Etiquetado de la mayoría de los "desvíos bellos de Francia", "complejo vacacional" tres flores y la ciudad floral.
Esta gruta era un lugar solitario con un suelo árido y seco en el cual crecían rosales silvestres, que eran las flores de la zona. Aquí fue donde, según el testimonio de Bernadette Soubirous, se produjo una de las apariciones marianas más conocidas de la Historia, en el año 1858.
Tanto si vamos en primavera como en verano encontraremos Riquewihr adornado con flores y disfrutaremos de un colorido impresionante por sus balcones, tejados, fuentes, etc... Pero también es en la Navidad cuando se encuentra un ambiente único, decorados navideños adornados de luces y velas, grandes abetos poblados de bombillas de colores, real-mente en Navidad es cuando se une la magia de estas fechas familiares con las tradiciones alsacianas.
Holanda tiene de estos lugares que lo dejan a uno pasmado ante tanta naturaleza organizada meticulosamente. Tiene de estos rincones, como el Jardín Keukenhof, donde todo parece una gran obra de arte, una pintura donde el artista hizo trazos sutiles en todos los tonos de la paleta que se puedan imaginar.
Keukenhof, que significa en el idioma nativo “Jardín de la cocina”, está formado por más de 32 hectáreas en el corazón de las localidades de Lisse e Hillegom. Algunos se refieren a este parque como “el jardín de Europa” y, una vez que se ve todo lo que dentro de él habita, no parece un título para nada pretencioso. Por ejemplo, paseando por el Jardín de Holanda encontrarás, como es lógico en este país, una impresionante colección de flores e híbridos de diferentes especies además de muchos invernaderos, algunos molinos antiguos, y varios lagos y fuentes.
Esculturas varias tampoco faltan. Todo un despliegue que es un deleite para los sentidos, con un impacto visual que no se limita a los increíbles colores de las flores sino a todo un conjunto de formas que convocan nuestra sensibilidad.
Un bosque dorado, un pantano lleno de flores, un bosque azul con zaleas, un jardín francés, un bosque de vosgos, un jardín inglés, un pueblo japonés y un jardín moderno japonés, son el legado que el banquero y filántropo estadounidense Albert Kahn dejó a la humanidad. Todos ellos reunidos en Les Jardins Albert Kahn, son un llamamiento a la paz mundial.
Este hermoso lugar de París, reflejan los ideales y emociones de este hombre que gastó casi toda su fortuna con el único fin de promover la armonía entre todas las culturas, es por esto que Les Jardins Albert Kahn tiene varios jardines que fueron diseñados con el objetivo de representar la vegetación de diferentes países.
Estos hermosos jardines están abiertos al público todos los días, excepto los lunes, y la entrada tiene un valor de 1,50 euros, los niños menores de 12 años no pagan, en algunas ocasiones es posible participar de la ceremonia de té, tradicional de Japón. Esta es sin duda una visita obligada en París.
...También se encuentra el célebre hotel Esplanade, construido en 1925 para los pasajeros que viajaban desde París a Estambul en el Orient Express. Al lado del hotel encontramos el Jardín Botánico, luego el Teatro Nacional y el Museo Mimara hasta llegar al corazón de la ciudad, la plaza del ban Josip Jelačić.
En esta parte de la ciudad también se recomienda conocer la universidad de Zagreb, del siglo XVII, la más antigua de Croacia y el Mercado Central.
En las calles hay mucha vida, especialmente en primavera y en verano cuando se celebra la Feria Internacional de flores Florart.
En las cercanías de la ciudad se encuentra el Parque Natural Medvednica, un espacio natural donde realizar excursiones, tomarse un recreo o descansar y hacer senderismo o por qué no, también esquiar en el centro de esquí Sljeme.
La gastronomía croata es apta para todos los presupuestos. Si queremos probar los platos típicos tenemos que pedir “špek fileki” (guisado de mondongo con tocino), štrukli (pasteles de queso cocidos o gratinados), “mlinci” (pava con pastas caseras), queso fresco con crema de nata, y por supuesto, donuts.
La belleza del otoño se aprecia especialmente en los grandes jardines. En Europa se encuentran algunos de los más espectaculares y España atesora un buen número de ellos. Paseamos entre flores y árboles centenarios para dar la bienvenida a la nueva estación.
La llegada del otoño dulcifica las temperaturas, da carácter a los atardeceres y, sobre todo, llena de color la vegetación. Campos, bosques y jardines se transforman en un arco iris que va del morado al verde. La belleza del otoño se aprecia especialmente en los grandes jardines.
“El mundo” nos selecciona ocho de ellos, desplegados en el kmz.
La iglesia tiene una altura de 74,5 metros, lo que la ha convertido en la cuarta construcción más alta de Islandia. Es obra del arquitecto Gudjón Samúelsson. Como suele ser habitual en Islandia, es de puro cemento; se accede a ella a través de una escalinata rodeada de flores de diversas variedades y colores, que también decoran su interior. Al ser el islandés un pueblo pesquero, en su interior hay una maqueta de un barco de pesca.
La escultura vegetal en forma de mujer me recuerda un parque en Montreal que está lleno de este arte, pero ahora no recuerdo cual es y menos aún puedo localizarlo.