Un romántico tren cremallera, consruído en 1924 y de cuidado aspecto de época, nos lleva a su cumbre, a 8 kilómetros por hora, lo que nos da tiempo para deleitarnos con los fascinantes paisajes.
Mientras, desde la ventana del "Petit Train" veo que somos observados por algunos rebaños de "pottokak", raza de caballo que podría encuadrarse dentro del tipo de caballo celta, representado en la costa cantábrica por tres subtipos: el caballo galaico, en Galicia; el asturcón, en Asturias y la pottoka en el Pais Vasco.
Está lloviendo. Hemos sacado billete solo de subida y tomamos un café mientras debatimos si descender andando o no, Pero...¿quien dijo miedo? Nos ponemos los chubasqueros y comenzamos el descenso.
Larrun fue también teatro de los enfrentamientos entre los ejércitos de Napoleón, de los que aún subsisten vestigios de sus reductos, y las tropas inglesas del Duque de Wellington.
Monte La Rhune - Television & Comunicaciones de Francia, monte que se puede subir en un tren antiguo con sistema cremallera y en días despejados tiene unas vistas únicas.
Larrun, Larun, Larhun y La Rhune Muchas denominaciones, pero todas nos llevan a este monte histórico, de 905 mts de altura, antesala del pirineo, montaña sagrada para los vascos, escenario de guerras y contrabandistas, divisorio de territorios, a un lado la costa vasca, al otro los Pirineos, atalaya privilegiada que nos deja una panorámica de 360º de Euskal Herría.