Si bien la propuesta de hoy no se cuenta entre las construcciones más conocidas de la capital china, Beijing, el hermoso templo de las Nubes Azules (o Biyun Si) no carece en absoluto de encanto e interés turístico.
Sito junto al acceso norte del parque de las Colinas Fragantes, su construcción dio comienzo en 1366. Años después, sufriría diversas ampliaciones, hasta que el emperador Qianlong acometió en 1748 la última reforma.
Ya en el siglo XX, su interior acogió entre 1925y 1929 los restos mortales del doctor Sun Yat-sen, fundador del Partido Nacionalista Chino y fundador de la República. En esta última fecha, su cadáver fue trasladado a Nanjing, donde aún se expone en un féretro de cristal.
La estructura del templo se inspira claramente en el monasterio de Jing Ci, en Hangzhou. En el primer pabellón, el visitante podrá admirar las estatuas de los generales Heng y Ha. Asimismo, el patio da cabida a la torre de la Campana y la torre del Tambor, sin duda dos elementos clave en cualquier recinto budista.
Cerca de las puerta norte del parque, se halla el hermoso templo de las Nubes Azules (Biyun Si), cuyos orígenes se remontan a los tiempos de la dinastía Yuan (1279-1368). El salón de la Puerta de la Montaña da cabida a dos divinidades (Ha y Heng) y permite acceder a un pequeño patio jalonado por las torres del tambor y la campana, que conducen a una estatua de bronce de Milefo.
A su vez, el salón conmemorativo de Sun Yat-sen acoge una estatua y un cojín de cristal, un regalo realizado por la URSS en 1925, coincidiendo con la muerte del fundador del Partido Nacionalista Chino o Guomindang. En el tramo final, se halla la pagoda del Trono de Vajra, que dio cabida a la primera sepultura de Sun. Además, también se aconseja visitar el salón de Arhat, en el que se pueden admirar 500 estatuas votivas denominadas luohan.
Por último, no hay que dejar de acercarse hasta el templo del Resplandor (Zhao Miao), que sobrevivió a los saqueos perpetrados por tropas extranjeras en la zona entre 1860 y 1900.
El post de hoy sugiere regresar a la capital del antiguo Imperio del Centro, Beijing, para conocer uno de sus jardines más hermosos: el parque de las Colinas Fragantes (Xiang Shan Gongyuan). Aunque éstos no acostumbran a copar las portadas de las guías de viaje, lo cierto es que pasear por el mismo constituye una excelente oportunidad de huir de las hordas de turistas y, al mismo tiempo, de disfrutar de unos instantes de paz y sosiego impagables.
Este hermoso lugar, situado a escasa distancia del Palacio de Verano, se halla en las denominadas montañas Occidentales (Xi Shan), que en su día albergaron un área de recreo imperial. Concretamente, el parque se localiza en el área más cercana a la ciudad.
Si se asciende por la ladera hasta la cima, se alcanza el llamado pico del Inciensario (Xianglu Feng), aunque también es posible realizar este recorrido en teleférico (éste funciona entre las 08.30 h y las 17.00 h). Desde lo más alto de la colina, se disfruta de una vista cautivadora.
Parque Xiangshan (Fragante Hills Park) está situado en la parte este de las colinas del oeste, 28 kilómetros (17 millas) al oeste (y un poco al norte) de Beijing Cental. Xiangshan es un gran parque de colinas y bosques que cubren 1,6 km ² (395 acres). Tanto el paisaje natural y las reliquias culturales son abundantes en el Parque Xiangshan.
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