Por la mañana llegan a la plaza todo tipo de vendedores. Unos ofrecen frutas, otros dulces, bisuterÃa, zumo de naranjas, cestos de mimbre o recuerdos de todo tipo.
Aquà atienden dentistas, curanderos o escribientes. Si tienes suerte, encontrarás -desde la mañana hasta la noche- a los gnaoua, acróbatas y bailarines.