Evidentemente, debes tomarte una foto con el emblema de la ciudad, que no es otro que la Sky Tower, la famosa torre de más de 300 metros de altura que durante la noche se enciende y le da a la ciudad una luminosidad y encanto únicos. Lo mejor que nos puede pasar, es que ese día se encuentre apoyando alguna causa, o promoviéndola, pues comienza un juego de colores increíble. Es el emblema oficial de Nueva Zelanda cuando se debe apoyar alguna causa.
Retomando la ciudad en sí, no dejéis de conocer la “K Road”, llamada realmente Karangahape Road y que sería la zona roja de Auckland. Claro que su fuerte en realidad no es este, sino la gran cantidad de bares, pubs y tiendas con gran encanto que podemos encontrar allí. Es una de las calles más pintorescas del mundo en cuanto a gentes y movimiento, aunque no sea tan conocida por otras de otros destinos.
¿Sabías que Auckland está hecha sobre y entre volcanes? Este ha de ser uno de los atractivos mayores de la ciudad, pues en medio podemos ver valles y lagos que nos brindan paisajes únicos, aunque es cierto que más bonitos los encontramos en otros puntos del país, como ser la Isla Rotorua, rodeada de lagos y volcanes que hacen de este punto, uno de los imperdibles. Está a 200 Km de Auckland, con lo que si tenéis tiempo, no podéis dejar de conocerlo.
Muchos deseamos conocer Nueva Zelanda por la innumerable cantidad de actividades que podemos realizar allí, entre ellas submarinismo donde los arrecifes se llevan toda nuestra atención. Pero también Auckland merece una visita de al menos dos días, una escapada de fin de semana para ser más claros, tiempo suficiente para conocer algunos de los atractivos más importantes de la ciudad aunque, os advierto, algunos días más no os sentarán mal.