Milford Sound, que fue descripto por Rudyard Kipling como "la octava maravilla del mundo", siempre es espectacular, y los visitantes pueden apreciar su belleza a través de vuelos panorámicos y cruceros.
Un fiordo se define como un valle en forma de U, creado por acción de un glaciar, que fue inundado por el mar. Los 14 fiordos que bordean la esquina sudoeste de la Isla Sur tardaron 100.000 años en formarse y los detalles finales se agregaron durante la edad de hielo más reciente, hace solo 10.000 años. Los maoríes atribuyen la creación de los fiordos a un albañil gigante llamado Tute Rakiwhanoa, que talló los valles escarpados con su hacha.
Este entorno natural extraordinario ofrece fiordos impresionantes, cascadas espectaculares y picos nevados. La selva antigua se agarra con todas sus fuerzas a las montañas, las cascadas caen cientos de metros hasta los fiordos enormes, los lagos brillantes y picos de granito tienen el mismo aspecto que hace mil años.
El trayecto del sendero más famoso de Nueva Zelanda se llama Milford Track, una ruta de senderismo que atraviesa una zona de montañas y bosque lluvioso templado dentro del Parque Nacional de Fiordland. Los puntos a unir son el lago Te Anau, hasta seguir en dirección norte hasta el área de Milford Sound, o la zona de fiordos del país famosa por sus aguas espejadas y decenas de cascadas que en torrentes caen al mar. En todo el trayecto se atraviesan selvas, humedales, y hasta un fantástico paso de montaña, todo dentro de un camino que era utilizado por los nativos maoríes y hoy es una de las atracciones turísticas del país. Lo que sigue es una selección de imágenes del trayecto que no siguen un itinerario lineal, sino más bien, que sirven para ilustrar los paisajes increíbles que pueden esperar a quienes atraviesan el lugar