En su estructura visual, destaca el balconaje corrido de madera con baluartes torneaos y las esquinas con arcos de sillería que se abren a las calles adyacentes. El ayuntamiento consta en su base de arcos que recogen los soportales clásicos de las plazas de este tipo, pero en pequeñas dimensiones. A su lado la parroquia rompe la homogeneidad, por color, construcción y envergadura.
El pueblo se alza sobre una ladera del cerro de San Cristóbal, donde sus calles y casas van dando forma a un pueblo con mucho encanto. Sin duda, un punto en todo pueblo que se tiene que visitar es su plaza central o plaza Mayor, y eso fue lo primero que visitamos. Pero, para nuestra sorpresa, al llegar a ella encontramos un mercadillo medieval, así que no pudimos sacar una foto de la plaza con sus edificios.
Las casas tradicionales están hechas de mampostería, ladrillo y tapial. Se conservan algunas de origen señorial que ostentan su heráldica en la fachada, como la casa rectoral de los beneficiados de la parroquia en la calle del Corro; la casa que perteneció al Santo Oficio, en la acera de la plaza Mayor (antigua calle del Pozo); casa en la calle de las Tercias que probablemente perteneció al Monasterio de las Huelgas Reales de Valladolid.
Santa Gertrudis se ha expandido con celeridad y precaución a la vez estos últimos años. Elegantes viviendas modernas flanquean las calles nuevas, la plaza del pueblo ha sido objeto de una remodelación a fondo y ahora está cerrada al tráfico rodado, sólo para transeúntes. Además, han abierto nuevas cafeterías y restaurantes de estética moderna que complementan a los establecimientos ibicencos de toda la vida.
El ayuntamiento de Puertomingalvo es uno de los lugares que más te llamarán la atención durante el paseo por la localidad. El edificio de grandes dimensiones fue edificado entre los siglos XIV-XV y está considerado uno de los mejores ejemplos del gótico civil turolense. Tanto en la fachada que da a la Calle Mayor como la que mira a la Plaza Nueva, destacan un conjunto de ventanas medievales propias de la arquitectura gótica.
Montblanc, también conocido como Montblanch, es un municipio que se encuentra al sur de la comarca de la Cuenca de Barbera, en la provincia de Tarragona. Se trata de un histórico pueblo medieval que constituye el mayor recinto amurallado de Cataluña, por lo que sus calles, plazas, iglesias y palacios suponen un gran atractivo turístico y uno de los destinos que no te puedes perder si eres un amante de la arquitectura y la cultura del medievo.
Bajo la atenta mirada del Teide se encuentra uno de los pueblos históricos de Tenerife. Icod de los Vinos, tierra de guanches y conquistadores es actualmente famoso por sus calles empedradas y pequeñas plazas que asoman a lugares tan icónicos como el conocido como Drago Milenario (Dracaena draco), símbolo vegetal de la isla y lugar de visita obligada durante tu paso por Tenerife. Da igual que seas turista o local, no dejes de pasar por allí.
Este bonito pueblo agrícola ofrece al viajero multitud de experiencias agradables con las que llenar su maleta de recuerdos. Obligada es la visita a la Casa Museo del afamado artista César Manrique. La plaza León y Castillo invita a relajarse bajo la sombra de sus laureles y eucaliptos. El centro del pueblo lo constituye la iglesia de Nuestra Señora de la Encarnación; en ella confluyen todos los caminos y calles del pueblo.
La mejor manera de disfrutar de Fornalutx es dando un paseo por sus empinadas calles de piedra. Un buen punto para empezar la visita es la Plaza de España, centro neurálgico del pueblo dónde encontraréis la mayoría de cafés y comercios. Junto a la plaza se encuentra la iglesia de Fornalutx cuyos orígenes se remontan al siglo XIII.
La villa de Castro Caldelas está situada en el Corazón de la Ribeira Sacra ourensana, en una colina que domina la ribera del río Edo. El pueblo desde antaño luce hermosas galerías blancas y casas blasonadas que nos muestran el rico esplendor medieval. La plaza del Prado es la principal entrada al Casco Antiguo, caminando por sus estrechas y empedradas callejuelas podemos conocer su historia a través de las casas señoriales con escudos que coronan sus fachadas. Estas empinadas calles, que durante la primavera lucen llenas de colorido, nos llevan a la fortaleza, símbolo más visible de la historia de Castro Caldelas.
El pequeño pueblo de Atienza, situado en un cerro rocoso de la Serranía de Guadalajara. Las ruinas de un imponente castillo dominan un casco histórico medieval con gruesas murallas y tortuosas calles con casas blasonadas, iglesias románicas y plazas con soportales. Fue declarado Monumento Histórico-Artístico Nacional en el año 1962.
Declarada Conjunto Histórico Artístico, Arévalo reúne un buen número de bonitas plazas y calles y bellos monumentos dignos de ser visitados, entre los que cabe destacar el Castillo, del siglo XV, la Muralla, de la que se conserva su parte norte con la Puerta de la Cárcel o Arco de Alcocer, que fue la entrada principal y que hoy lo ocupa la oficina de turismo. Su casco viejo, que ha sufrido intervenciones inoportunas, conserva todavía parte de su esplendoroso pasado. Varios puentes medievales pero muy reformados en épocas posteriores permiten cruzar el cauce del Arevalillo.
Alcázar de San Juan, Ciudad Real, Castilla-La Mancha
La visita a Alcázar de San Juan está llena de lugares de interés turístico y patrimonial como las calles del casco antiguo que nos llevarán a la Plaza de Santa María, presidida por una estatua de Miguel de Cervantes, donde se encuentra la citada iglesia de Santa María la Mayor. Se conservan también viejas construcciones y casonas de piedra rosada como la Posada de Santo Domingo o el Palacio del Gran Prior, construido entre 1235 y 1237.
Hablamos de la bellísima población de Monells , lanzada en los últimos tiempos a la fama por el rodaje de la película 8 Apellidos catalanes , que seleccionó este pueblo por su excelente estado de conservación. Monells , es un lugar de origen medieval , lo cual es visible en cada una de sus calles y plazas y en sus inicios fue construida en torno al castillo que se asentaba en la zona del cual tan solo quedan parte de las murallas.
El viajero hará bien en deambular por las calles y callejas de este coqueto pueblo, algunas llanas, otras empinadas, en las que no faltan las flores del tiempo en ventanas y balcones ni recónditos y evocadores rincones. En el castillo ducal, que está abierto al público, destaca la potente torre del homenaje de planta cuadrada que en la actualidad alberga el Archivo Histórico de los Suárez de Figueroa y todo un museo. Desde la cima se otea una excelente panorámica de la villa y alrededores. Desde la sombra de esta fortaleza creció la población de Feria y se desparrama por la suave ladera con una cascada de casas blancas que recuerdan a los pueblos alpujarreños. Destacan el rincón de la Cruz, la plaza (siglo XVII), las casas consistoriales y el poyo del Carnero.
El ámbito espacial de la plaza queda cerrado en sus lados mayores por la fachada principal del palacio de los Condes de Olivares, en el frente norte, y la fachada lateral de la colegiata de Santa María de las Nieves y el Pósito, en el lado sur. En ella convergen cuatro calles y un pasaje cubierto por bóveda de cañón conocido como “el Camarín”, que conecta la cabecera del templo con el Pósito. Se trata, por tanto, de un espacio público cerrado y monumental en el que colegiata, palacio y pósito conforman un conjunto paradigmático de los poderes civiles y religiosos característicos de la Edad Moderna española que dotaron de entidad propia al pueblo de Olivares.
El nombre de Baños viene de la riqueza acuífera de su subsuelo, con fuentes naturales y múltiples pozos, y de la Encina, por la tradición que cuenta que la Virgen se apareció sobre una encina. En una primera aproximación a los atractivos de Baños de la Encina, te diré que en la plaza Mayor, hoy en día llamada plaza de la Constitución, vas a encontrar la Casa Consistorial y la iglesia de San Mateo y algunas casas solariegas muy bonitas.
En el centro de la plaza, una fuente con la imagen de la Virgen de la Encina en lo alto. De allí sale la calle Santa María, al final de la cual está el Arco de los Benalúa que te llevará al castillo de Bury al-Hamman, y en dirección contraria, la Ermita y Camarín de Jesús del Llano.
El Arcángel San Rafael constituye una advocación que viene a formar parte de la imagen de la ciudad de Córdoba, llegando a convertirse en un icono representativo del pasado histórico y religioso de la ciudad. Sus calles, así como las principales plazas cordobesas, quedan presididas por la figura del Arcángel Custodio, representado en la mayoría de las mismas coronando una columna de índole clásico, a modo de Triunfo de la Antigüedad.
En el interior de la provincia de Valencia , donde las terrazas de típicos cultivos mediterráneos horadan una tierra histórica que ha sido testigo de mil batallas medievales, se encuentra la pequeña localidad de Chelva. Esta perla de la comarca de Los Serranos pasa los inviernos adormecida, con poco más de mil habitantes, como si la vida no fuera con ella y a merced de los fríos vientos que castigan el valle. Sin embargo, al acercarse la primavera, el rumor de las aguas de las numerosas fuentes de Chelva, tanto subterráneas como al aire libre, se hace cada vez más audible y ejerce de dulce despertador de árboles, explanadas, plazas, calles y gente.
La herencia cultural de Graus sobrevive en su arquitectura, sus tradiciones y sus muestras de arte. La ciudad medieval sigue viva en sus calles y en su casco antiguo, declarado Conjunto Histórico y en el que todavía se conservan partes de la muralla y tres de sus puertas. La Plaza Mayor constituye un lugar único en el que conviven diferentes estilos arquitectónicos y destacan también en la ciudad la Basílica de la Virgen de la Peña, la iglesia parroquial de San Miguel (ambas de origen románico), el medieval Puente de Abajo y las tres casas-palacio (Barón, Heredia y Bardaxí). Son solo algunas de las muestras de una localidad que ofrece historia, monumentos, arte (con su singular románico) y al mismo tiempo naturaleza, rutas de senderismo y bellos enclaves naturales.
Mota del Cuervo, sobre nombrada El balcón de La Mancha por su situación sobre una loma y sus molinos que se yerguen sobre el cerro. Cruce de caminos, lugar de artesanía, campos de agricultura, enclave histórico de señoríos… señas que se extienden por sus calles y plazas a modo de edificios o conjuntos que le dan a la visita un sabor inigualable y definen su identidad manchega.
Hoy en día mantiene Laguardia el urbanismo típico de los pueblos medievales, tres calles principales, estrechas y alargadas, atraviesan la población de norte a sur. Se unen entre ellas por callejas o plazas y la población se ciñe con una monumental muralla.
Todo el pueblo se encuentra horadado por bodegas o cuevas familiares que hacen que sus calles sean totalmente peatonales.
Castropol luce señorial en un promontorio escalonado que desemboca en la majestuosa ría del Eo, frontera natural entre Asturias y Galicia. Esta ilustre villa es la noble frontera entre dos territorios afines y sus calles, que cada año se engalanan de alfombras florales coincidiendo con la festividad del Corpus, son una muestra de un interesante Casco histórico en el que destaca tanto la arquitectura civil como la religiosa de los últimos tres o cuatro siglos. Palacios y casas blasonadas, capillas, iglesias, plazas, parques, todo en Castropol nos conduce a un pasado de gloria y esplendor.
Su conjunto urbano destaca por sus construcciones populares a lo largo de su arteria principal, la calle San Miguel, a lo largo de la que veremos casas porticadas y otras con corredores y rejas magistralmente trabajadas. Desemboca en la Plaza Mayor, famosa por acaecer en ella una de las andanzas del Lazarillo de Tormes y su amo, el Ciego. La plaza de forma rectangular y estilo inconfundiblemente castellano alberga entre sus tesoros el antiguo Ayuntamiento y unos tradicionales soportales sujetos por vigas de madera vista.
La Gran Vía ha sido una de las obras más trascendentes de España, hubo que demoler más de 300 casas y afectó a casi 50 calles. Gracias a la Gran Vía se consiguió una mejor comunicación entre el centro de Madrid (Calle Alcalá) y el noroeste de la ciudad (Plaza de España).