Esta localidad de sangre castellana y apellido aragonés es capaz de proporcionar una de esas escapadas inolvidables en las que uno es capaz de escuchar cómo se funde el repique de campanas con un ruido de tambores y espadas escapándose como lo hacen los siglos por las aguas del río Gallo bajo su puente de piedra.
En el extremo oriental de Guadalajara, en un lugar perpetrado a base de batallas y de largos inviernos, surge uno de los pueblos más hermosos y medievales de Castilla. Molina de Aragón atesora viejas historias de moros y cristianos, de señores, señoríos y princesas. Una alineación de calles estrechas que atrapan las noches más frías miran hacia arriba buscando el abrigo de su inmenso castillo-fortaleza.
Este fin de semana, aprovecharé el puente para ir a nuestra casita familiar en una población de Guadalajara, por tierras de Molina de Aragón en el interior del Parque Natural del Alto Tajo, se trata de una zona de amplios barrancos donde sus poblaciones pueden quedarse incluso sin habitantes durante los meses de invierno. Concretamente la población es Escalera, que alberga los sabinares mayores de europa y cuenta en invierno de solo dos familias una de las cuales ostenta un hostal, ya que el futuro de la zona guarda sus esperanzas en el turismo. Os pongo tambien un enlace a un vídeo sobre aquello, que hice ya hace algunos añitos y que tengo colgado en youtube y que espero alguien se atreva a visualizar La foto corresponde a la Hoz que labra el Rio Gallo.