Aunque su principal atractivo es su playa, posee otros atractivos como el faro Sacratif (el más importante de la costa granadina), la antigua torre vigía que le da nombre, su animado paseo marítimo y un nuevo paseo panorámico pedestre que recorre los acantilados entre el casco urbano y que tiene su punto más espectacular en un puente colgante de cristal (Puente Colgante de Jolúcar).
El río sigue su curso hasta llegar a Almazán, localidad histórica y fronteriza cuyos orígenes se remontan a la Edad del Bronce. A buen seguro que el Duero también fue testigo del pasado militar de la villa, que conserva en la actualidad las puertas de Berlanga, Herreros y la Villa. Sin olvidar el impresionante puente medieval sobre el Duero formado por 13 arcos de medio punto ojivales, que camina paralelo a una moderna pasarela colgante de ondulado trazado.
La UNESCO lo declaró Monumento de la Humanidad hace algunos años, reconociendo así su incalculable valor. Fue el primer puente transbordador de estructura metálica del mundo y se considera una maravilla de la ingeniería de su tiempo, un “sueño de hierro laminado”. Fue inaugurado en 1893 y ha estado en funcionamiento desde entonces.
Situado en el tramo final de la Ría de Bilbao, a pocos metros de su desembocadura en el Cantábrico, el Puente une Portugalete y Getxo y es por lo tanto un motivo perfecto para visitar estos dos encantadores pueblos, las callejas medievales del primero, los fastuosos palacetes del segundo.