El Camino de los Laureles, por ejemplo, es un antiguo reducto de laurisilva representativo del Terciario. Tegueste se beneficia de los vientos alisios, que favorecen a la agricultura de secano que históricamente ha sostenido a la población del municipio. La construcción del municipio comenzó a principios del siglo XVI en la zona conocida como El LLano entre el barranco Las Tapias y el de las Ceras, lugar donde se erigió la primera ermita en honor a San Marcos Evangelista y que en 1701 se trasladó a su emplazamiento actual.
La Villa de Tegueste se encuentra en el nordeste de Tenerife, a las puertas del Parque Rural de Anaga con una superficie de 26,4 km2. Rodeado por el municipio de La Laguna, Tegueste no tiene costa, sino que se emplaza en una amplia cuenca hidrográfica que garantiza un clima suave y una amplia riqueza natural. Aunque la mano del hombre ha modificado el paisaje primitivo de la zona, actualmente pueden admirarse reductos de pinares y laurisilva, que conviven con árboles de eucalipto y especies forrajeras.