Disfrute de las extraordinarias playas y de los complejos, practique esnórquel o buceo en las aguas cristalinas y conozca las maravillas de las profundidades en un submarino semisumergible.
Recorra esta hermosa isla y disfrute de la costa escarpada y de su ambiente encantador, inmaculado y sofisticado, único en el Caribe por su legado sueco y francés.
Gustavia, la capital y con su característica forma en herradura, conserva varios edificios de la época de la colonización sueca y, al ser puerto franco, es un destino ideal para irse de compras. A Gustavia se viene a disfrutar de la tranquilidad y de sus hermosas playas, a broncearse, descansar bajo algún árbol frondoso o en una hamaca, a navegar, ir de compras y a desconectarse del mundo.
La isla de San Bartolomé, St. Barth o Saint Barts, esta pequeña isla volcánica de poco más de 20 kilómetros cuadrados es un placer para todos los sentidos: podrás sorprenderte con la variedad de sus paisajes, largas playas de fina arena blanca y espectaculares atardeceres.