La iglesia más antigua de Aguilar de la frontera, levantada sobre una cueva en la que se dice que apareció la Virgen y en la parte exterior de los muros del castillo, ocupa también el solar de otra, llamada de Santa María de la Mota.
Aguilar de la Frontera cuenta con un rico patrimonio monumental. Los restos del viejo castillo es un recordatorio del pasado medieval, cuando el dueño del castillo y del mismo Aguilar de la Frontera era Gonzalo Fernández de Córdoba, que lo recibió del Rey Enrique II por su fidelidad durante la guerra civil y por su intervención en la defensa de la capital durante el asedio de Pedro I.