Chile está repleto de observatorios astronómicos sobre todo en la provincia de Atacama, una de las regiones mas secas y con el cielo mas limpio del hemisferio sur.
El Observatorio Europeo del Sur (ESO) escogió dicha zona para instalar el telescopio óptico mas potente del mundo, el VLT o very large telescope que puede registrar la luz emitida por estrellas localizadas a 18000 millones de años luz.
El complejo astronómico de La Silla se convierte así en el mas importante; le siguen los de Las Campanas, Cerro Pachon, Cerro Tololo y Paranal. Hay muchos mas observatorios en todo el país convirtiendo a Chile en un enclave astrofísico de relevancia mundial.
El Cerro Armazones es claramente notorio en esta región. Domina el paisaje con una altura de 3.064 metros sobre el nivel del mar. La aridez, transparencia del cielo, y el gran número de noches despejadas por año, hacen de esta región uno de los lugares más privilegiados del mundo para la astronomía óptica y en infrarrojo cercano. Por esta razón la ESO (European Southern Observatory) ha desarrollado a 40 km al oeste de Cerro Armazones el VLT (Very Large Telescope). Éste queda emplazado en Cerro Paranal, y se halla constituido por cuatro telescopios de 8.2 m de diámetro
Cerro Paranal está ubicado a poca distancia del litoral de la II Región, a unos 12 kilómetros de la costa, entre las ciudades de Taltal y Antofagasta y en pleno Desierto de Atacama. Se sitúa unos 130 kilómetros al Sur de Antofagasta, junto al cordón Vicuña Mackenna, formando parte de la cordillera de la costa. Está al Norte de la Reserva Nacional Poposo, junto a la carretera costera y a relativa distancia de la autopista de la Ruta 5 Norte.
Con 2.644 metros de altura y una superficie de 72.000 hectáreas, Paranal se caracteriza por permanecer despejado casi 350 noches cada año, con escasa turbulencia y gran transparencia atmosférica, que lo convirtieron naturalmente en uno de los puntos óptimos para ser usado como base astronómica para observaciones telescópicas. La zona, además, está rodeada de un gran potencial turístico que incluye las antiguas salitreras de Atacama, la red de estaciones del antiguo ferrocarril calichero y, más al interior, el Parque Nacional Llullaillaco, que alcanza la frontera con Bolivia.