Mauseleo del Emperador Ming Xiaoling

El Mausoleo Imperial Xiaoling, la tumba del primer emperador de la dinastÃa Ming (1368-1644) de China, Zhu Yuanzhang, representa las técnicas de construcción más importantes de los mausoleos de China y fijó un modelo para los más de 20 mausoleos imperiales en los siguientes 500 años.
Las autoridades locales asignaron hace poco unos 40 millones de yuanes (4.8 millones de dólares USA) para un proyecto de reparación del Mausoleo Xiaoling, que está situado al pie de la montaña Purpúrea de Nanjing, capital de la provincia oriental china de Jiangsu, y fue incluido en la lista de Patrimonios de la Humanidad de la UNESCO en julio de 2003.
Según los registros históricos, el lugar donde se ubica el Mausoleo Xiaoling fue seleccionado por el mismo emperador Zhu Yuanzhang. La construcción del mausoleo comenzó en 1381 y duró casi 40 años.
Desde el Arco Xiama, la entrada al mausoleo, hasta Baocheng ( Ciudad de los Tesoros), donde está ubicado el palacio subterráneo, el Mausoleo Xiaoling tiene una longitud de 3,000 metros, y un muro de circunvalación que mide 22.5 kilómetros.
"La tumba, además de hereder las ventajas de los mausoleos imperiales construidos en las dinastÃas Tang (618-907) y Song (960- 1279), creó un nuevo sistema que se convirtió en la estructura arquitectónica general de los mausoleos de las dinastÃas Ming y Qing (1644-1911)", explicó Yu Jinbao, subdirector del departamento de administración de mausoleos de Nanjing.
Con una historia de casi 600 años, las construcciones del Mausoleo Xiaoling han sufrido graves daños, pero sus famosas estatuas de piedra se mantienen en buen estado.
Estas esculturas gigantes, que se distribuyen a lo largo de la Avenida Sagrada del Mausoleo Xiaoling, representan el arte excelso de la escultura de los comienzos de la dinastÃa Ming.
En la parte central de la Avenida Sagrada hay 12 pares de estatuas con forma de animales, que guardan simbólicamente el camino hacia la tumba. Todas las esculturas están esculpidas de un mismo bloque de piedra, y entre ellas resaltan el camello, que mide 3.68 metros de altura, y el elefante, que pesa más de 80 toneladas.
También hay cuatro pares de estatuas de piedra de ministros y generales, que están de pie durante siglos sirviendo a su Majestad enterrada bajo tierra.
En la primavera del año pasado se descubrieron en esas esculturas de piedra varios fósiles de corales y algas con más de 300 millones de años de antigüedad.
La parte interior del mausoleo está bien protegida desde hace mucho tiempo. En diciembre de 1998, una detección magnética mostró que el palacio subterráneo no habÃa sufrido robos.