“Los vecinos de bien que viven con un miedo continuo viendo cómo la impunidad campa por nuestras calles: disparos en la noche, jóvenes exhibiendo armas y disparando al aire, robos, agresiones, vehículos robados circulando sin control por la barriada… Todo esto sin nombrar los numerosos episodios que sufrimos estos últimos años llegando a engrosar un récord en tiroteos, heridos y muertos”, explican en este encuentro de varios residentes con el periódico. “Parece que vivimos en una realidad paralela, sin pertenecer a esta ciudad. Todos miran hacia otro lado, los vecinos de bien que son la gran mayoría se ven indefensos, sometidos a la ley de la calle.